🤫 El Decálogo de No me cuentes dramas
Hola sufrido y dramático suscriptor que vaga por lejanas tierras orientales.
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No sé si eres un frikazo nivel “over 9 thousand” o si te estás iniciando en esto del entretenimiento asiático gracias a la “Ola Coreana” (Hallyu 한류).
En cualquier caso, te presento…
“El Decálogo de NMCD”
Los mandamientos que considero básicos cuando le vas a dar una oportunidad a este mundillo o incluso si ya disfrutas de él desde hace tiempo.
Todo suscriptor de “No me cuentes dramas” debería tenerlos en cuenta.
Así que allá van…
(1) Ten la mente abierta
A mi me gusta Asia Oriental (en especial Japón, Corea, China) porque no tiene nada que ver con Occidente. Japón es el país más raro que te puedes echar a la cara. Corea del Sur no anda muy lejos. Y China… buf, China es China. #elocuencia
Por tanto, si vas a consumir el entretenimiento audiovisual que se hace allí, por muchas influencias occidentales que les estén llegando, tienes que tener en cuenta que se trata de una cultura muy diferente. Y te lo digo yo que convivo con una de ellas a diario. O sea, es que a veces parece que ha venido de otro planeta.
Es más, entre Japón, Corea y China también hay diferencias abismales, y cuando llevas un tiempo consumiendo su cultura pop te das cuenta de cuánto. Ni siquiera puedes usar la misma vara de medir para las tres.
En cualquier caso, si no aceptas que allí la cultura es muy diferente, su comportamiento es muy diferente, sus maneras, su educación (para bien y para mal), su forma de decir las cosas, sus expresiones, etcétera, son —en muchas ocasiones— algo chocante, tanto para hombres y mujeres… Es prácticamente imposible que te vaya a gustar su industria del entretenimiento.
Por otro lado, es más divertido por eso. Por lo distinto.
Si estás cansado de los convencionalismos de Hollywood y las producciones norteamericanas, españolas o europeas, descubrir el entretenimiento asiático es un soplo de aire fresco.
Y, sinceramente, me parece improbable que estés aquí y vengas con la mente cerrada, pero tenía que decirlo:
Hay que tener la mente abierta para disfrutar de la cultura de Asia Oriental.
E irremediablemente, entender esto te lleva al siguiente y obligatorio mandamiento:
(2) Consume la versión original con subtítulos
Salvo que sepas japo, coreano o chino en sus respectivos casos, tienes que ver los dramas en VOS.
Esto va más allá del típico debate de versión original VS doblaje en las películas de occidente.
¿Por qué? Pues por todo lo explicado en el punto 1.
Ningún estudio de traducción y doblaje puede conseguir acercarse siquiera a la experiencia de representar la cultura oriental. De hecho, ya te estás perdiendo cosas incluso si los subtítulos son buenos. Pero es que si además le agregas un doblaje que va a ser, sí o sí, muy inferior a la interpretación original, pues apaga y vámonos.
Si lo haces así, es casi seguro que no te va a gustar. O al menos no tanto como podría gustarte. Y luego irás diciendo que las películas y series de Asia Oriental son… meh.
¿O tú crees que un japonés podría traducir y doblar con éxito… yo que sé… Torrente: El Brazo Tonto de la Ley?
Pues igual.
Si buscas experimentar algo diferente, tienes que hacer lo posible para consumir la experiencia original lo más original posible.
Y eso hoy día es sencillo con las plataformas de streaming.
Imagina en los 90s. Tenías que andar tirando de foros en internet donde aficionados traducían las películas y series al inglés, y luego de ahí otros foros las traducían al español. Y encontrar los subtítulos correctos, corregir problemas de sincronización, y aún así comerte traducciones chusqueras muchísimo más inferiores de lo que hoy haría cualquier Inteligencia Artificial con el clic de un botón.
Capisci?
(3) No te fuerces a ver géneros que no te gustan
Si en algo es muy superior la industria del entretenimiento oriental con respecto a la occidental, es en la variedad.
Hay chorrocientos géneros y subgéneros a la vez.
Porque beben mucho del manga japonés y el webtoon coreano.
Por ejemplo:
Está el género de la comedia romántica, uno de los más tochos.
Pero es que hacen tantas, que luego hay todo tipo de subgéneros que cuelgan de la categoría principal.
Por ejemplo, en el mencionado género de “comedia romántica” te puedes encontrar subgéneros como estos:
Intercambio de cuerpos (personas, animales, edad)
Mujer/Hombre que se hace pasar por Hombre/Mujer.
De Instituto, entre estudiantes.
Chaebol (romance entre rico y pobre).
Amigos de la infancia que se reencuentran.
De la época Juseon.
De viaje en el tiempo.
Sobrenatural o fantástico.
De deseo concedido por suceso extraño.
De reencarnaciones.
De Bromance.
Y más…
… sin olvidar que se mezclan entre ellos.
Así que puede que no te guste la comedia romántica, pero igual un día tonto te ves una de intercambio de cuerpos y ese drama en concreto te encanta. Aún así, no te fuerces, si no te gusta, no te gusta. Pilla uno de acción, de terror, de venganza, policial, thriller…
Al final casi todos los géneros suelen tener subgéneros como los de arriba y otros que me he dejado fuera.
Es casi imposible que no encuentres uno que te fascine.
Lo cual me lleva al siguiente mandamiento:
(4) ¿Te ha gustado mucho un actor o actriz? ¡Profundiza!
Esto es clave en cualquier decálogo cinéfilo o seriefilo y es incluso más útil en los dramas asiáticos.
Si has visto un drama y te gustado mucho un actor o actriz… Mira en sus trabajos anteriores o futuros porque es muy posible que haya participado o participe en proyectos que te van a gustar también.
Y es que creo que parte del gran éxito que está teniendo oriente con el entretenimiento a nivel global es esto:
Son muy buenos manejando el fandom alrededor de un actor o actriz.
Y créeme, cuando veas un drama que te encante, es casi seguro que acabarás enganchado a un actor o actriz.
¡Te harás fan!
Y la industria sabe jugar muy bien con eso.
Las agencias les miman, escogen proyectos que son ideales para ellos, proyectos buenos, interesantes, donde se van a lucir… Y a medida que más popularidad va ganando el actor, más probable es que los proyectos en los que esté involucrado sean buenos y te gusten también. No siempre pasa, obviamente, pero suele funcionar mejor que cualquier recomendación random. Cuando de primeras el actor o actriz te encanta, eso suma muchos puntos para que consumas el drama y te acabe molando.
Aún así, por mucho que te guste un actor, no caigas en el siguiente error…
(5) No te obligues a terminar dramas que te aburren
Esto es básico para todo tipo de entretenimiento pasivo: dramas, películas, libros, juegos, series, canales…
Profundizar es bueno, pero si has empezado con algo que parecía que iba molar, pero luego tras darle 2, 3, 4 capítulos sigue siendo un muermo y no te atrapa, no te fuerces demasiado a consumirlo entero.
Hay mucho que ver y poco tiempo para disfrutar de tu hobby, así que no lo pierdas viendo algo que claramente no te está gustando.
Cambia a otra cosa porque si algo hay es entretenimiento asiático para parar un tren.
Es algo que con el tiempo aprendes a detectar cada vez más rápido o incluso antes de ponerte el piloto.
Aunque “piloto” no es la palabra más adecuada.
Y te explico por qué en el siguiente mandamiento.
(6) Disfruta del formato compacto de los dramas
En los dramas asiáticos (que recuerda que son “series” en general) no existe tal cosa como un “Episodio Piloto”, tan típico en EE.UU.
Esto pasa por varias razones.
Una de ellas es que los proyectos suelen llegar muy planificados, compactos y ya financiados y aprobados antes siquiera de rodar nada.
O lo hacen entero (y se emite) o no lo hacen.
A los coreanos, japoneses y chinos no les gusta perder el tiempo. Son hiperactivos. Sobre todo si hay dinero de por medio.
Y la siguiente razón es una de las cosas que más me gusta de la industria de los dramas asiáticos:
Las series son CORTAS.
Cortas de verdad.
La mayoría de las series son de una sola temporada auto conclusiva.
8 episodios y 16 episodios son los más comunes
También las hay de 10, 12 y de 24.
Y por supuesto también tienen series de más de 50 y de 100 episodios, pero no es lo normal. Lo estándar son series cortas y compactas.
Y eso hace muy asequible su consumo.
Además, al ser más compactas no están obligados a meter tanto relleno para cumplir con el calendario de una cadena durante años. Y tampoco son carne de cancelación. Nunca te quedarás colgado sin el final de la serie porque Netflix decide cancelar un drama después de haber emitido 2 temporadas. Como mucho te darán la alegría de que habrá una segunda temporada.
En especial me encantan los dramas con una sola temporada de 8 episodios de aproximadamente una hora de duración. Me parece el formato perfecto para las series. La mayoría que tienen este formato son buenísimas precisamente porque casi no hay relleno.
Solo en ocasiones especiales, cuando el drama ha sido todo un éxito, hacen una segunda temporada que, debido a todo lo anterior, suele estar más improvisada y por eso siempre es inferior a la original.
Tres temporadas ya es rarísimo (por ejemplo “El Juego del Calamar” ha tenido que ser la serie más vista de toda la historia de Netflix para sacarles a los coreanos 3 temporadas – siendo realmente una segunda temporada partida en dos).
Así que puedes relajarte sabiendo que son compactos y que, si te gustan, los terminarás seguro sin tener que aguantar toneladas de relleno.
¿Otra forma que ayuda a verlos y completarlos?
(7) Déjate acompañar
He encontrado que, determinados géneros que pensaba que yo jamás vería en solitario, se han convertido en muy divertidos para mi cuando los veo acompañado.
A ver, reconozco que en mi caso es algo especial porque veo muchos dramas coreanos en compañía de una coreana. Y aprovecho para preguntarle por la cultura, por detalles, por actores, actrices, comida que aparece en pantalla (yum!)…
Por ejemplo, a mi me gusta la comedia romántica, pero no tanto si es excesivamente “pastelosa” y predecible. Sin embargo, cuando a veces veo comedias románticas de ese corte con mi pareja, las disfruto porque he aprendido a reírme de ellas, surgen coñas internas, te dejas llevar por el fandom de un actor o actriz, etcétera.
El momento de EL BESO en una comedia romántica –un acontecimiento que a veces solo ocurre UNA vez en todo el drama– es especialmente hilarante y divertido cuando te puedes reír en compañía.
Hasta tal punto es así, que he acabado yo divirtiéndome más con este tipo de dramas que Ji Sun, la surcoreana con la que cohabito.
Después, los dramas más violentos y serios es más probable que los vea yo solo. Quizá en tu caso sea al revés y prefieras compañía en los dramas más serios y soledad en los dramas excesivamente románticos y pastelosos, no lo sé.
Lo que quiero decir es que si le das una oportunidad a verlos en pareja o con amigos puede que descubras una nueva dimensión o género que no te habías planteado consumir, y que de repente te gusta.
Y no será lo único que te gustará. De hecho…
(8) Ten a mano el Shazam
Porque vas a descubrir muchas joyas musicales.
Y si te descuidas, acabarás escuchando K-pop, indie-pop coreano y otros clásicos.
A mi ya me gustaban un par de grupos, algunas canciones de artistas coreanos… Pero a partir de que empecé a ver dramas con regularidad he descubierto todo un mundo musical que me encanta.
En especial varios grupos y solistas del mundillo indie y popero coreano que se han convertido en mis habituales en las listas de reproducción.
También escucho bastante K-pop mainstream, grupos femeninos mayormente, clásicos y actuales.
(En estos casos admito que no es solo por la música, también por las chicas y el negocio que hay detrás y cómo está montado todo a nivel de marketing)
Y es que hay dramas con bandas sonoras flipantes, ya sea de recopilación de artistas o de composición específica.
En concreto mi favorito es un tal “tearliner”, un autor indie surcoreano que tiene muchos dramas en su haber y que me ha hecho descubrir una barbaridad de música.
También llega el punto en que si me entero de que la BSO de un drama está hecha por tearliner, entonces me intereso por la serie y acabo viéndola.
Hasta tal punto puede llegar a influir también la música.
Sin embargo, no todo lo que envuelve a la industria influye en positivo…
(9) Destruye los bloqueos regionales
Si solo tienes contratadas las plataformas de streaming habituales: Netflix, Prime Video e incluso Disney+, te puedes hinchar de ver dramas. Pero es cierto que, tarde o temprano, te darás cuenta (especialmente estando en esta newsletter) de que te estás perdiendo un mundo que va mucho más de allá de lo que occidente decide comprar y distribuir.
Otro problema es que, incluso usando plataformas mainstream, muchos dramas no están disponibles en determinadas regiones, siendo España/Europa una de las más damnificadas, incluso si vas a una plataforma especializada como Rakuten Viki.
Por tanto, si eres un aficionado a este mundillo sabrás bien que al final te toca tirar de VPN, probar diferentes plataformas de streaming, y buscar en “sitios no-autorizados” donde ofrezcan dramas que de otra forma no podrías conseguir y ver con subtítulos en inglés o español.
Puede que no suene “ético”, pero es que yo pagaría encantado la suscripción de una plataforma que me trajese todos los dramas asiáticos y películas al momento y con subtítulos en inglés, como hace Crunchyroll con el anime. Pero lamentablemente no existe de forma oficial, ni parece que vaya a existir pronto, así que a veces no queda otra que buscarse la vida.
En resumen, quiero decir que si no exploras, si no te mueves un poco, apenas si estarás teniendo acceso a la punta del iceberg de este mundillo.
Y aunque es posible que sea suficiente para ti con las principales plataformas de streaming que tenemos en España, si de verdad quieres encontrar petróleo, lo más seguro es que te tengas que mover.
Por supuesto estar en NMCD hará que tengas gran parte de la información que el resto de aficionados no tiene.
Y ya para terminar el decálogo…
(10) Entiende y disfruta de su gastronomía
El gobierno coreano tomó buena nota de cómo Japón levantó espectacularmente una industria del turismo hacia el país nipón gracias a la gastronomía y la cultura popular mostrada en mangas, animes, películas, videojuegos…
Y vaya si lo está replicando bien. En ciertos géneros los personajes están comiendo a cada rato y los primeros planos de la deliciosa comida nunca faltan en cámara.
Como te pille con hambre, enseguida querrás hacerte un Ramyun instantáneo coreano, probar sus barbacoas, sopas, o degustar Gimbap y Tteokbokki.
También abusan de lo que ellos llaman ‘Soju’, una bebida alcohólica bastante fuerte que además puede ser de varios sabores artificiales. Es el equivalente a la cerveza que en España está por todos lados, en todos los medios, a todas horas, y por supuesto en todo bar y restaurante.
Así que este es el último consejo y mandamiento:
– Mejor estar con la barriga llena si no quieres parar el drama a mitad del episodio para ir a la cocina a preparar algo.
¡No digas que no te lo advertí cuando tu estómago empiece a rugir mientras ves dramas!
En fin, que es broma (pero es cierto que pasa, ya lo creo).
Lo realmente importante es que para los coreanos (y orientales en general) la gastronomía y el comer juntos es muy vital. Y descubrir la gastronomía coreana y asiática es algo que va ligado a su cultura pop, por supuesto.
Así que entiéndela, pruébala (hay muchos restaurantes coreanos ya en España, en casi cualquier ciudad – no siempre regentados por coreanos, son los chinos los que están explotando más el negocio) y…
¡Disfrútala!
(11) Mandamiento Extra: Localiza las localizaciones
Ok, por definición un decálogo consta de 10 ítems, pero este es un regalito.
Un truco que tienen los coreanos para grabar tantos dramas en tan poco tiempo y además ahorrar en costes es que repiten un montón las localizaciones (debidamente “maquilladas” para cada drama, por supuesto).
Por tanto, si te fijas bien, cuando lleves un tiempo empezarás a reconocerlas entre diversos dramas.
Y si te fijas aún mejor y tomas nota, además de las localizaciones obvias en Seúl como la Namsan Tower, el puente sobre el río Han (y el propio río Han), el Lotte World, los barrios y monumentos nacionales, etc., verás muchos otros lugares pintorescos que después te hará tanta ilusión (o más) visitar en Seúl que las típicas visitas a los lugares famosos a los que va todo el mundo.
Y lo de que querrás acabar visitando Seúl, o cualquier otra ciudad o país, solo por ver sus dramas y películas, no es para nada descabellado. Si ya eres un aficionado a los dramas estoy seguro de que la idea ya te ronda la cabeza. Y si estás empezando… Bueno, entonces solo date un poco de tiempo.
En cualquier caso, espero que la bienvenida a esta lista de correo te haya entretenido e inspirado a la hora de disfrutar del mundo de los dramas y de la cultura pop de Asia Oriental.
A partir de ahora, si no nos acabamos encontrando por España o Seúl, te veo cada semana aquí, en…
🤫 No me cuentes dramas
안녕히 가세요!
Rafa